SABES QUé.... 11/11/2022
Lo principal que te recomendamos (con esto y en general cuando de equiparte se trata): que no te compares con X deportista porque esa persona se dedica profesionalmente a la montaña (alpinismo, trekking...) ni con amigos o porque tu vecino que "sabe de esto" te ha dicho que es mejor zapatilla que bota. Está claro que estas recomendaciones o investigaciones que hacemos por nuestra cuenta siempre están hechas con la mejor intención, pero desde el Grupo Green damos tanto valor a tu seguridad en la montaña, que insistimos en que te pongas en manos expertas.
¿Por qué mucha gente prefiere las zapatillas? Porque sienten mayor libertad de movimientos, porque son más ligeras y más rápidas de poner y quitar. Para una ruta senderista corta, en zonas bien delimitadas que no tengan demasiado desnivel y en la que no llevamos mucho peso en la mochila, las zapatillas son una opción perfecta. También son las elegidas a la hora de aproximarnos a la zona donde vamos a hacer otra actividad como escalada o barranquismo, por ejemplo. Claramente hablamos de zapatillas específicas de montaña, que todos hemos visto en algún momento a gente con calzado casi de ir por la calle metiéndose en una ruta de trekking, ¡ojo con esto! Estas zapatillas tienen una suela preparada para ofrecer un agarre y tracción que favorece el caminar por senderos abruptos con facilidad.
¿En qué momento debo decantarme por una bota? Dentro del trekking, es mejor ponernos unas botas cuando la ruta se convierte en una experiencia de varios días, ya que en esas circunstancias llevamos con nosotros en la mochila (ya hablaremos de ello en otro artículo para poder guiarte) todo lo necesario y eso suma peso. Cuando llevamos una carga a la espalda, los pies acaban sufriendo más y la bota ayuda a hacerlo más llevadero. Además, protege el tobillo y lo refuerza. En el momento en el que nos planteamos montañismo / alpinismo, especialmente en nieve o hielo, las botas son el calzado indispensable.
Tanto zapatillas como botas pueden tener o no una membrana impermeable (el Gore-Tex es la más conocida en el mercado) que repele el agua y la nieve para evitar que el pie se moje. ¿Por qué cuentan con ella también algunas zapatillas si no se recomiendan para la nieve? Porque podemos practicar trekking en zonas de río o en épocas del año donde llueve más y en esos casos, nos salvarían de acabar empapados.
También el calzado técnico de montaña tiene en común en zapatilla y en bota, el refuerzo de la puntera para proteger los dedos, el agarre y la tracción que comentábamos para ir seguros en ruta, la amortiguación para evitar lesiones, la comodidad con la que el caminante realiza sus pateos y la durabilidad. Al final, están específicamente pensados para ser una extensión de tu cuerpo en la montaña, por ello todos estos factores son compartidos independientemente de la elección. A la hora de elegir una actividad concreta, como decíamos más arriba, ya tocará buscar especificaciones técnicas.
